El país imaginado


Animada por el melancólico encanto de la niñez que se escapa, impulsada por la fina exquisitez de su tono narrativo, El país imaginado traza una elegante fábula acerca de la memoria y las oportunidades perdidas.
 Imbuida de una atmósfera mágica, de delicados elementos que prefiguran lo que ha de ser el país imaginado, esta bella historia nos traslada a una China de principios del siglo XX repleta de fantasmas, de bodas entre vivos y muertos, de supersticiones y ritos ancestrales. En medio de todo ello se encuentra la protagonista, una joven que vive atemorizada por el compromiso nupcial que para ella desean pactar sus padres y que, mientras, solo tiene ojos para la hija de un vendedor de pájaros ciego, la hermosísima Xiaomei, con quien inicia una tímida relación de amistad y dependencia. En sus citas en el parque al que los ancianos van a pasear a sus pájaros, las dos descubren la importancia de lo que se cuenta y de lo que no, de la lealtad y de la belleza, con todo su poder para huir de los abismos abiertos por los demás.

 Comentarios de los jurados del premio Emecé 2011


El país imaginado es, más que ninguna otra cosa, una novela bella. Bella por su prosa, por el mundo en el que nos permite sumergirnos,  por los personajes que nos presenta. Con una escritura impecable, Eduardo Berti nos cuenta una historia que no nos será posible olvidar. Una de esas que acompañan para siempre.”
Claudia Piñeiro


“Desde la primera línea, el lector queda preso del encanto de una voz inolvidable, segura y delicada a la vez, intensamente conmovedora; y vamos recibiendo el regalo de un mundo y una historia extraordinarias, como si escucháramos, de pronto, el más inesperado y hermoso de nuestros propios secretos.”
Leopoldo Brizuela
El país imaginado cuenta la historia iniciática de una adolescente china y lo hace con la maestría de un estilo exacto y suave, con pleno dominio narrativo, combinando el pudor y la sensualidad, y mostrándonos cómo la flor secreta de una vida se abre paso entre las piedras más duras de la tradición.”  
Pedro Mairal


Fragmentos de algunas reseñas:

“En esta novela de aprendizaje, ganadora del premio Emecé 2011, Eduardo Berti crea uno de los personajes femeninos más sutiles de la literatura argentina. En la China de principios del siglo XX, un mundo que se debate entre los fantasmas de la tradición y el cataclismo de la modernidad, una adolescente se inicia en los secretos y las trampas del amor, y descubre el modo de encontrar su libertad pese al yugo de las reglas sociales”.
Pedro B. Rey (La Nación, Argentina)

“El país imaginado no es solamente China, sino también la muerte. Hay una, muy importante para la protagonista, al comienzo del libro: la de la abuela. Cuando Ling duerme, la abuela desaparecida le habla. En estos capítulos intercalados en la narración se insinúa una idea muy bella: es la abuela la soñadora y la nieta la soñada. Así de delicado y sutil es todo en esta novela conmovedora y elegante”.
Hugo Caligaris (ADN Cultura, Argentina)

“Con una voz acertadísima, que podría pasar por la traducción de un texto chino, Eduardo Berti hace hablar en El país imaginado a Ling, una muchacha cuya subjetividad puja por separarse –quizás como todas las subjetividades oprimidas– de los mandatos de una época”.
(Paula Jiménez, Clarín, Argentina)

“Ling le enseñará a Xiaomei el nu-shu, el idioma secreto de las mujeres, unos signos que conformaban un sutil sistema de escritura. En esta extraordinaria novela de Berti, el nu-shu es también el idioma de la amistad”.
(Silvina Friera, Página/12, Argentina)